Vis a vis
El centro penitenciario de Zuera es una visita habitual de nuestro ciclo social ‘HashtagQUI’ -posible por la aportación del grupo Eurofund– desde que arrancó hace ya casi seis años. Intentamos entrar un par de veces por curso, además de hacerlo también en distintas cárceles de la provincia de Madrid -gracias al trabajo de Solidarios para el Desarrollo-, porque ahí dentro la realidad es muy distinta de lo que se imagina fuera.
Nuestra experiencia es limitada e incompleta, por supuesto, apenas una entrada de un par de horas de duración para compartir nuestra charla ante un grupo de internos previamente seleccionados, pero siempre se repite la feliz sensación de que los asistentes conectan con el mensaje y son capaces de llevar a su realidad lo que allí se comparte.
Ojalá sigamos volviendo y ojalá sigamos sintiendo que esta conferencia va mucho más allá del presunto mérito personal de su conferenciante. Porque aquí no estamos para hacernos los interesantes, sino para hacer contacto en el compromiso de cada ser humano -viva con la realidad que viva- por alcanzar e instalarse en su mejor versión posible. De los pies a la cabeza.